de escuelas y sistemas filosóficos que abarca al menos 2.500 años.
La alquimia occidental ha estado siempre estrechamente relacionada con el hermetismo,
grecoegipcia y legendario alquimista. Estas dos disciplinas influyeron en el nacimiento del
rosacrucismo, un importante movimiento esotérico del siglo XVII. En el transcurso de los
comienzos de la época moderna, la alquimia dominante evolucionó en la actual química.
aspectos místicos, esotéricos y artísticos. La alquimia fue una de las principales precursoras
de las ciencias modernas, y muchas de las sustancias, herramientas y procesos de la antigua
alquimia han servido como pilares fundamentales de las modernas industrias químicas y
metalúrgicas.
Aunque la alquimia adopta muchas formas, en la cultura popular es citada con mayor
frecuencia en historias, películas, espectáculos y juegos como el proceso usado para
transformar plomo (u otros elementos) en oro. Otra forma que adopta la alquimia
es la de la búsqueda de la piedra filosofal, con la que se era capaz de lograr la habilidad
para transmutar oro o la vida eterna.
En el plano espiritual de la alquimia, los alquimistas debían transmutar su propia
alma antes de transmutar los metales. Esto quiere decir que debían purificarse, prepararse.
La alquimia como investigación de la naturaleza
La percepción popular y de los últimos siglos sobre los
convertir plomo en oro, y que empleaban la mayor parte
de su tiempo elaborando remedios milagrosos,
Fundaban su ciencia en que el universo estaba compuesto
por el nombre vulgar de las
sustancias que los representan, a saber: tierra, aire, fuego y agua, y con ellos
preparaban un quinto elemento que contenía la potencia de los cuatro en su
máxima exaltación y equilibrio.
La mayoría eran investigadores cultos, inteligentes y bien intencionados, e incluso
Estos innovadores intentaron explorar e investigar la naturaleza
misma. La base es un conocimiento del régimen del fuego y de las sustancias
elementales del que tras profundas meditaciones se pasa a la práctica,
comenzando por construir un horno alquímico. A menudo las carencias debían suplirse
profundizar en su arte.
Para los alquimistas toda sustancia se componía de tres partes mercurio, azufre y sal
siendo estos los
estas tres partes eran llamadas principios. Por manipulación de las sustancias
y a través de diferentes operaciones, separaban cada una de las tres partes
que luego debían ser purificadas individualmente, cada una de acuerdo al régimen de fuego
que le es propicia, la sal con fuego de fusión y el mercurio y el azufre con
destilaciones recurrentes y suaves.
Tras ser purificadas las tres partes en una labor que solía conllevar
mucho tiempo, y durante el cual debían vigilarse los aspectos planetarios,
las tres partes debían unirse para formar otra vez la sustancia inicial. Una vez
hecho todo esto la sustancia adquiría ciertos poderes.A lo largo de la historia de esta disciplina,
los aprendices de alquimista, se esforzaron en entender la
naturaleza de estos principios y encontraron algún orden y sentido en los resultados
de sus experimentos alquímicos, si bien a menudo eran socavados
por reactivos impuros o mal caracterizados, falta de medidas
Esto motivaba que, tras años de intensos esfuerzos, muchos
acabaran arruinados y maldiciendo la alquimia. Los aprendices por lo general
debían empezar por trabajar en el reino vegetal hasta dominar
el régimen del fuego, las diversas operaciones y el régimen del tiempo.
Para diferenciar las sustancias vulgares de aquellas fabricadas por su arte,
los alquimistas, las designaban por el mismo nombre de acuerdo a alguna de sus propiedades,
si bien procedían a añadirle el apelativo
de «filosófico» o «nuestro». Así, se hablaba de «nuestra agua»
para diferenciarla del agua corriente. No
obstante, a lo largo de los textos alquímicos se asume que el aprendiz
ya sabe diferenciar una de otra y,
en ocasiones, explícitamente no se usa, ya que de acuerdo al arte hermético«no se debe dar
perlas a los cerdos», razón por la que muchos fracasaban al seguir al pie de la letra las
diferentes recetas. La «iluminación» sólo se alcanzaba tras arduos años de riguroso
estudio y experimentación. Una vez que el aprendiz lograba controlar el fuego,
el tiempo de los procesos y los procesos mismos en el reino vegetal,
trabajos en el reino animal y mineral.
Sostenían que la potencia de los remedios era proporcional a cada naturaleza.
Los trabajos de los alquimistas se basaban en las naturalezas, por lo que a cada
reino le correspondía una meta: al reino mineral la transmutación de metales
vulgares en oro oplata, al reino animal la creación de
una «panacea», un remedio que supuestamente curaría todas las enfermedades y prolongaría
la vida
indefinidamente. Todas ellas eran el resultado de las mismas operaciones.
Lo que cambiaba era la materia prima, la duración de los procesos y la vigilancia
y fuerza del fuego. Una meta intermedia era crear lo que se conocía como menstruo y
que lo que ofrecía era una multiplicación de sí mismo por
inmersión de otras substancias semejantes en fusión/disolución (según su naturaleza)
con éstas.
De modo que se conseguía tanto la generación como la regeneración de las substancias
elementales.
Estos no son los únicos usos de esta ciencia, aunque sí son los más conocidos y
mejor documentados.
Desde la Edad Media, los alquimistas europeos invirtieron mucho esfuerzo y dinero en la búsqueda de
La alquimia como disciplina espiritual y filosófica
Los alquimistas sostenían que la piedra filosofal amplificaba místicamente el conocimiento
de alquimia de quien la usaba tanto como fuera posible. Muchos aprendices y falsos alquimistas,
tenidos por auténticos alquimistas, gozaron de prestigio y apoyo durante siglos,
aunque no por su búsqueda de
estas metas ni por la especulación mística y filosófica que se desprendía
de su literatura, sino por sus contribuciones mundanas a las industrias artesanales de la época:
la obtención de pólvora, el análisis y
refinamiento de minerales, la metalurgia, la producción de tinta, tintes, pinturas
y cosméticos, el curtido del cuero, la fabricación de cerámica y cristal,
la preparación de extractos y licores, etcétera.
La preparación del aqua vitae, el «agua de vida», era un experimento bastante popular
entre los alquimistas europeos.
Los alquimistas nunca tuvieron voluntad para separar los aspectos físicos de las
interpretaciones metafísicas de su arte. La falta de vocabulario común para procesos y conceptos químicos,
así como también la necesidad de secretismo, llevaba a los alquimistas a tomar prestados
la cábalay otros campos místicos y esotéricos, de forma
que incluso la receta química más simple terminaba pareciendo un obtuso conjuro mágico.
Más aún, los alquimistas buscaron en esos campos los marcos de referencia teóricos
en los que poder encajar su creciente colección de hechos experimentales inconexos.
A partir de la Edad Media, algunos alquimistas empezaron a ver cada vez más estos
aspectos metafísicos como los auténticos cimientos de la alquimia y a las sustancias químicas,
estados físicos y procesos
materiales como meras metáforas de entidades, estados y transformaciones espirituales.
De esta forma, tanto la transmutación de metales corrientes en oro como
la panacea universal simbolizaban la evolución desde un estado imperfecto, enfermo, corruptible
y efímero hacia un estado perfecto, sano, incorruptible
y eterno; y la piedra filosofal representaba entonces alguna clave mística que haría
esta evolución posible.
Aplicadas al propio alquimista, esta meta gemela simbolizaba su evolución desde la
ignorancia hasta la iluminación y la piedra representaba alguna verdad o poder espiritual
oculto que llevaría hasta esa meta. En los textos escritos según este punto de vista,
e imaginería textual de las obras alquímicas tardías contienen típicamente múltiples
capas de significados, alegorías y referencias a otras obras igualmente crípticas;
y deben ser laboriosamente «descodificadas» para poder descubrir su auténtico significado.
La alquimia en Occidente y otros lugares donde fue ampliamente practicada estaba
(y en muchos casos aún está) íntimamente relacionada y entrelazada con la
tanto con la astrología como con la teúrgia.
La alquimia en la época científica
De la alquimia occidental surge la ciencia moderna. Los alquimistas utilizaron muchas
de las herramientas que se usan hoy.
Estas herramientas eran a menudo fabricadas por ellos mismos
y podían estar en buen estado, especialmente durante la Alta Edad Media.
Muchos intentos de transmutación fallaban cuando los aprendices de alquimia
elaboraban sin conocer compuestos inestables, lo que se veía empeorado por
las precarias condiciones de seguridad.
Hasta el siglo XVII, la alquimia fue en realidad considerada una ciencia seria en Europa:
por ejemplo, Isaac Newton dedicó mucho más tiempo y escritos al estudio de la alquimia
que a la óptica o la física, por lo que es célebre. Otros eminentes alquimistas del mundo
Parmigianino. El nacimiento de la química moderna surgió con los aprendices de alquimia
desencantados de su nulo progreso alquímico y con los críticos resentidos de la alquimia;
tanto unos como otros lograron progresos en varios campos de la naturaleza en el
siglo XVIII, con el que proporcionaron un marco más preciso y fiable para las
elaboraciones industriales y la medicina, libres del hermetismo
propio de la alquimia (pues la alquimia nunca se prodigó como ciencia de multitudes),
y entrando en un nuevo diseño general de conocimiento basado en el racionalismo.
A partir de entonces, todo personaje que entroncaba con la alquimia o que «oscurecía»
sus textos fue despreciado por la naciente corriente científica moderna.
de la primera mitad del siglo XIX, que trabajó sobre conceptos
parecidos a la antigua alquimia, tales como la fuerza ódica, pero su trabajo no entró
en la corriente dominante de la discusión científica.
La transmutación de la materia, disfrutó de un momento dulce en el siglo XX,
cuandolos físicos lograron transformar átomos de plomo
Sin embargo, los nuevos átomos de oro, al ser isótopos
muy inestables, resistían menos de cinco segundos antes de desintegrarse.
Más recientemente, informes de transmutación de elementos pesados
sobre fusión fría en 1989. Ninguno de estos hallazgos ha podido ser aún reproducido
con fiabilidad.
El simbolismo alquímico ha sido usado ocasionalmente en el siglo XX por psicólogos
y filósofos.
Carl Jung revisó el simbolismo y teoría alquímicos y empezó a concebir el significado
profundo del trabajo alquimista como una senda espiritual. La filosofía, los símbolos
y los métodos alquímicos han gozado de un cierto renacimiento en contextos
La historia de la alqumia
La historia de la alquimia se ha convertido en un vigoroso campo académico.
A medida que el oscuro lenguaje hermético de los alquimistas va siendo
gradualmente «descifrado», los historiadores van haciéndose más
conscientes de las conexiones intelectuales entre esa disciplina y
otras facetas de la historia cultural occidental, tales como la sociología y la psicologí
Etimología
La palabra alquimia procede del árabe al-kīmiyaˀ (الكيمياء) o al-khīmiyaˀ (الخيمياء), que podría
estar formada por el artículo al- y la palabra griega khumeia (χυμεία), que significa ‘echar
juntos’, ‘verter juntos’, ‘soldar’, ‘alear’, etcétera (de khumatos, ‘lo que se vierte’, ‘lingote’,
ordenaba quemar «los antiguos escritos de los egipcios, que trataban sobre el arte de fabricar
oro y plata»1 la khēmia transmutación. La palabra árabe kīmiyaˀ, sin el artículo, ha dado lugar
a ‘química’ en castellano y otras lenguas, y al-kīmiyaˀ significa, en árabe moderno, ‘la química’.
Se ha sugerido que la palabra árabe al-kīmiyaˀ significaba en realidad, originariamente,
‘la ciencia egipcia’,tomando prestada del copto la palabra kēme, ‘Egipto’,
así alquimia era el 'arte de Keme' (o su equivalente en el dialecto medieval bohaírico del copto,
khēme).
La palabra copta deriva del demótico kmỉ, y éste
a su vez del egipcio antiguo kmt. Esta última palabra designaba tanto al país como al color
‘negro’ (Egipto era la ‘tierra negra’, en contraste con la ‘tierra roja’, el desierto circundante),
por lo que esta etimologíapodría también explicar el apodo de ‘magia negra egipcia’.
En la Edad Media se solía usar la expresión ars chimica para aludir a la alquimia.
A veces, se considera a la palabra crisopeya sinónimo de alquimia, pero ésta es mucho más
que la mera búsqueda del método para fabricar oro. La palabra crisopeya viene del griego
χρυσoσ, ‘oro’,
y πoιεω, ‘hacer’. El prefijo criso entra en la formación de palabras en que interviene el oro,
como crisoterapia (tratamiento de ciertas enfermedades por medio de sales de oro).
continentes. La general predilección de estas tradiciones por el lenguaje críptico y simbólico
hace que resulte difícil trazar sus mutuas influencias y relaciones «genéticas».
Pueden distinguirse al menos dos tendencias principales, que parecen ser ampliamente
La alquimia china estaba intimamente relacionadacon el taoísmo, mientras que la alquimia
occidental desarrolló su propio sistema filosófico, con relaciones sólo superficiales
con las principales religiones occidentales. Aún está abierta la cuestión de si estas dos
ramas comparten un origen común o hasta qué extremo se influyeron una a la otra.
La alquimia moderna
En la época actual se han realizado progresos para alcanzar las metas de la alquimia usando
métodos diferentes a los de la alquimia tradicional. Estos avances pueden
en ocasiones ser llamados «alquimia» por razones retóricas.
crear una vida desde cero, y los filosóficamente opuestos a la posibilidad de la IA la han
comparado con la alquimia, como Herbert
y Stuart Dreyfus en su ensayo de 1960 Alquimia e IA (Alchemy and AI).
Sin embargo, debido a que el objetivo específico de la alquimia es la transmutación humana
más que la creación de vida desde cero, la investigación
genética, especialmente el ayuste, estaría más cerca de la misma.
Transmutación nuclear
en oxígeno. Este procesoo transmutación ha sido posteriormente realizado a escala comercial
mediante el bombardeo de núcleos atómicos
La idea de convertir plomo en oro no es del todo incorrecta ya que, teóricamente,
bastaría extraer 3 protones de un átomo de plomo (82 protones) para obtener otro pero de oro
(79 protones).
De hecho, en 1980 Glenn T. Seaborg transmutó plomo en oro,solo que el oro resultante
apenas dura unos segundos por su inestabilidad atómica y la cantidad obtenida es tan
microscópica que hace impensable su rentabilidad.
Afirmaciones de transmutación no verificadas
En 1994, R. Sundaresan y J. Bockris informaron haber observado
reacciones de fusión en descargas eléctricas entre barras de carbono
sumergidas en agua. Sin embargo, ningunade estas afirmaciones ha sido reproducida
por otros científicos y la idea está en la actualidad ampliamente desacreditada.
desinterés: «La alquimia me parecía una cosa afectada y ridícula». Su opinión cambiaría
sobre la traducción de las ocho primeras secciones de un tratado de alquimia
libro budista con base taoísta. El inicio de su contacto con la alquimia se vio
así como un centro procesual al que denominó posteriormente sí-mismo.
Necesitó diez años para elaborar un diccionario de referencias cruzadas con el fin de poder
entender los significados incluidos en los textos alquímicos
, así como quince años para disponer de una biblioteca semejante a las de sus sueños.6
Jung vio la alquimia como una proto-psicología occidental dedicada al logro de la individuación. En su interpretación,
la alquimia era el recipiente en el que el gnosticismo sobrevivió sus diversas purgas
en el Renacimiento. En este sentido, Jung veía la alquimia como comparable al yoga en
que los fenómenos observables de lo inconsciente, tales como los sueños, contienen elementos
simbólicos que también se pueden hallar en la simbología alquímica.
Además, dedica un análisis al paralelismo
transferenciales acaecidos en el proceso de individuación en su trabajo
La psicología de la transferencia (1946).
confrontación entre la alquimia y la psicología analítica. Como tercera parte de dicha obra se
A todo ello no hay que olvidar la importancia que revistieron para el acceso de Jung a la esencia
Mas adelante les contare sobre la alquimia en Asia Central, la astrologia y demas ciencias de la antiguedad.
Espero sus comentarios y aportes,
Saludos Sole